La criolipólisis es un tratamiento no invasivo que permite reducir adiposidad localizada a partir de la aplicación de frío controlado y preciso en las zonas del cuerpo a tratar.

 

Dicho frío, congela los adipocitos con temperaturas que van desde los -4 C° hasta los -10 C° generando una muerte celular programada de la grasa sin dañar tejido ni células circundantes.

 

Tras la realización de la sesión, el organismo tarda 20-30 días aproximadamente para ir eliminando a través del sistema linfático dichas células muertas, y disminuyendo así el espesor en el área tratada.